"En el inicio fue el Verbo y el Verbo era Dios..." en alguna parte de la biblia viene algo por el estilo, en realidad no supe en cual porque al buscarlo me enteré que mi padre se llevó el libro sagrado (versión antiguo y nuevo testamento que teníamos en casa), sólo porque cree que somos unas herejes y que ese escrito regalo de mi abuela no tenía porque sufrir en un lugar coptado por los demonios.
En fin, no es porque sea religiosa, la verdad que no, pero me llamó la atención eso del verbo y más allá de que para algunos signifique una deidad, la palabra como tal, tiene un sentido sumamente importante.
"En el inicio fue el Verbo..."
Primero que nada, la palabra es una idea creada en sociedad y recreada por cada individuo, si cierras los ojos y alguien te dice "cielo" puedes imaginarlo con detalles más o detalles menos, si te dicen "siete" visualizarás siete cosas o un numerote 7, el punto es que ahí en tu pizarrón mental estará el cielo o el siete y, así sucesivamente. Por lo tanto, la palabra ya es una idea por si sóla y cada uno la toma según sus vivencias, creencias, debrayes o según la droga recetada.
Las palabras, tienen una carga energética, y por lo tanto atraerás aquello que con la palabra llamas. A veces estamos tan habituados a hablar de cierta manera que dejamos de notar algunas negatividades que pueden afectarnos incoscientemente como decir "es que esta muuuy dificil" cuando en realidad podemos decir "es poco fácil" y nos quitamos un barrera que de entrada pusimos con la forma de hablar, etc.
En el yoga, tienen un mantra que seguro han escuchado en la famosa canción de mi George Harrison de los Beatles "My sweet lord", que es dedicado a Krishna "Hare Krishna, Hare Krishna, Krishna Krishna, Hare Hare, Hare Rama, Hare Rama, Rama Rama, Hare Hare" y yo lo he cantado y escuchado en tantas versiones que bueno.... el punto es que aunque yo no practico al 100% esa filosofía de vida, el repetir ese mantra me produce un bienestar indescriptible, he aquí lo energético de nuevo.
Otro aspecto es la forma en que se dicen las cosas y por ahí hay un dicho popular muy sabio: "en el pedir esta el dar" ahi si soy una firme creyente de que te pueden pedir mil cosas a las que dirías nooo, never, jamás, pero si lo dicen de una linda manera puedes acceder y aflojar (no solo en aspecto sexual eh), pero si alguien llega queriendo algo de una manera poco gentil pues ni como decirle "¡claro, con gusto!".
De igual forma el escuchar aquello que nos beneficia y aquello que no, y con esto no me refiero a que nos tapemos los oidos a todo lo que nos dicen, sino saber escuchar lo que es bueno para nosotros y lo que no, pues dejarlo de lado o simplemente alejarnos. Siempre se puede aprender de alguien con solo escucharle.
Otra cuestión es saber callar cuando es necesario, digo también es prudente de vez en cuando y cerraré con una frase sabia de Sigmund Freud "uno es dueño de lo que calla y esclavo de lo que habla".
A cuidar lo que hablamos y como lo hacemos pues la palabra demuestra hasta cierto punto nuestro grado de consciencia! Me sentí como muy de "la moraleja del cuento es..." jajaja ok, ok!!