martes, 26 de febrero de 2008

GATO ALEBRIJE Y ARLEQUÍN DE OFICIO

Aún no estoy segura, creo que alguna droga viajaba feliz de arriba para abajo a través de mi cuerpo. Lo que si tengo claro es que estaba en la profundidad de una gruta obscura y húmeda (nada especial) y que no estaba sola.

Pasé por un lugar muy estrecho y escuché el revolotear de los murciélagos peludos que ya habían tejido toda una colcha. Me agradó bastante ese pequeño zumbido, en el gran silencio de la cueva.

Me sentí acompañada al ver que el gato alebrije (y arlequín de oficio) me estaba hablando y, al mismo tiempo flotaba como un mesías sobre el agua. Quería a toda costa que le diera dulces blancos de los que llevaba en mi mano (aún no entiendo como es que llegaron ahí o a que inocente infante se los quité).

No supe cuantos minutos, horas o días caminé para salir de la mentada gruta, pero el gato siempre estuvo haciendo payasadas para que no me aburriera, en una de esas hasta imitó a Frijol vomitando bolas de pelos.

Le dí un dulce de arroz blanco y lechoso a cambio de algo... jajajaja y ahora esta colocado sobre uno de los muebles de mi casa, seco y convertido en madera con una extraña sonrisa.

EXTRANJEROS

Este escrito lo hice con la intensión de describir esa especie de bloqueo mental cuando no quiero afrontarme a mi misma para dar solución a ciertas situaciones. Además, plasmo esa comodidad para ver nuestras benditas cualidades echar al baño los defectos. Afortunadamente, siempre hay un "extranjero" (amigo, desconocido, frijol, o nuestra parte aún no explorada, etc.) que nos hace descubrir cosas y entonces nos vamos perdiendo el miedo.

Veo la profundidad de un ser desconocido,
pero ¿que tan diferente es de ti?.
Puedes llegar a conocerlo, pero
temes ver toda su inmensidad.

No sabes si confiar y creer en este ente
tienes la esperanza de que te ayude;
¿a qué? quizá a conocerte,
a odiarte, a amarte, o solo a
perderte un poco más.

No tiene un camino fijo,
se acerca al extranjero,
quiere perder el miedo al mundo,
a sí mismo, a su propia luz y obscuridad.

"Recuerdas el miedo a los extranjeros,
a lo desconocido", me dijo alguien.
¿pero cómo no tener miedo a ello
cuando tu mismo te desconoces?
.
.
.


NECESIDADES PARTE II

Quizá las necesidades más intensas son las sicológicas, aquellas que no son materiales, sentimientos e ideas que se transforman (a la par con nosotros, en casos extremos no tanto) y nos exigen cosas nuevas.

Hablando específicamente del tema del amor ¿realmente necesitaremos a alguien para sentirnos mejor?. Uno se siente de lujo, tranquilo, piensas en todo lo que puedes lograr y que estas en el mejor momento de tu vida, total ya te sientes parte del cosmos y en equilibrio con él; y entonces, ¿buscas unas persona para que te acompañe en ese mundo de felicidad?.

Es posible que cuando estás sano mentalmente lo primero que buscas es compartir con otra persona de una manera más cercana y especial. Sin embargo, las conductas mentales medio pacheconas y destructivas de los seres humanos también nos llevan a depender de otros seres, para sentirnos con valor, pero no porque surja de nosotros mismos sino porque alguien más nos lo está otorgando.

Cuando dices quiero hacer planes con tal o cuál, ¿por qué lo haces o por qué no? ¿ hasta que punto es válido decir quiero vivir con este ente porque me hace sentir más chido que otros? ¿por qué desear algo así?

¿Es posible que exista una especie de dependencia positiva (si es que existe eso)? Ver a una persona como una fuente (solo una de toda la variedad) de felicidad y además, que te ayuda a ser un mejor ser humano. Pero es muy diferente cuando la relación con ese alguien te perturba y entonces hay un retroceso en tu supuesto camino hacia la perfeccíon jajaja. Qué haces entonces, sigues o te alejas?.

El punto es no perderse y dejar que la vida gire en torno a otros, porque entonces qué pasaría si se nos van, seríamos vil basura que esta a disposición del mundo. Si no es este fulano o fulana ya llegará otra y el espacio siempre quedará completo. Pero ¿que pasaría con el mismo YO? (probablemente nada mientras ya se haya decidido así, pero no deberíamos victimizarnos).

¿Que pasaría con el mismo YO?...

jueves, 21 de febrero de 2008

NECESIDADES PARTE I

Uno va por la vida haciendo y teniendo lo que quiere y, siempre nos acompañan las grandiosas necesidades que deben cubrirse: desde echarse un yakult por la mañana para eso de la flora intestinal (y que el lactobacilo kasei shirota) hasta ver un capítulo de los Simpsons antes de cenar.

Alguns son apuros creados por nosotros mismos: "no es que me voy a ver bien rudo con eso", "ya me veo comprando la primera temporada del Conde Patula", "es que tengo todos los discos de Pink Floyd, pero quiero esa caja de 14 discos, porque es edición especial", "tenemos que ir al barrio chino porque ahí hacen la mejor comida china de esta nación, aunque esté caro" (jaja) .

Claro esta que existe un apego sicológico a las cosas o a todo aquello que creemos de extrema importancia para seguir existiendo, que nos hace desechar otras posibilidades como comprar productos de segunda mano, o comer en un lugar más barato y de mejor calidad, etc. Y lo hacemos porque nos sentimos chics o más fans o no sé, cualquier cosa que eleva alguna parte de nuestro ego (consciente o inconsciente).

Hay cosas que no podemos dejar de lado para seguir viviendo, por ejemplo, si no te tomas el yakult (jaja, regresando al tema de la flora intestinal) y sufres de estreñimiento se te pueden reventar los intestinos. O que tal si te quedas vagabundeando toda la noche y terminas acostado al lado del changoleón en una jardinera en algún lugar desconocido y tenebroso, tendrás que buscar a fuerza un cartón o periódico para calentarte o ya de perdida repegartele al indigente famoso (iughh).

El punto es jerarquizar nuestras necesidades, tratar de cubrir aquellas que realmente valgan la pena y, no mortificarnos tanto por el resto que seguramente son payasadas. Además, ser realmente conscientes del porque adquirimos lo que adquirimos (no me lo van a creer pero encontré los 5 mandamientos del consumismo).

No estoy criticando los gustos de las personas. De hecho en muchas ocasiones me he pillado en ondas consumistas y vanales para cubrir mis talones de Aquiles sicológicos. ahí se los dejo de tarea jajajaja.