Nunca había ido para aquellos lugares lejanos, por si fuera poco no había ido a la casa de un extraño como lo hice en esta ocasión y jamás sola.Todo comenzó cuando el diciembre pasado en mi viaje a San Luis Potosí conocí a Roberto (un joven de Zacatecas) en Real de Catorce. Estuvimos chacoteando y usmeando el pequeño pueblo por un par de horas aproximadamente y, creo que eso bastó para caernos bien. Le envié correos y todo terminó en que la semana pasada osea la Semana Mayor (jajaja que cagado suena) fui a visitarlo.
Zacatecas, me pareció una ciudad muy pequeña (Roberto dice que parece longaniza) a todos los lugares llegas bien rápido caminando. Una ciudad con muchos edificios coloniales que la han hecho tener el título de Patrimonio de la Humanidad desde el 93.
Tiene muchos callejones y casas que dices "ah no ma" con detalles que las hacen únicas. Balcones bien chidos. Todo antiguo claro.
En cuanto a lugares naturales, pues tiene parques bastante lindos y dignos de echar una jeta en ellos. Esta el cerro de la Bufa con su teleférico y su cruz. La mina del Edén a la cual nunca pudimos entrar a pesar de que lo intentamos tres días (eso si fue la gran salación).
La comida también es un medio para conocer un lugar y yo probé los raspados de don Monico, el café San Patricio, las Raspanieves, los tacos envenenados, ush las tortas del pasaje son la neta.
Lo pro fue que estaba llevándose a cabo el Festival Cultural número XXII , ah caray, creo que si me he perdido de mucho pensando que solo existía el Cervantino. Además, estaban dando cortesías para algunas presentaciones (eso me agradó).
Tuve la oportunidad de ir a unos cuantos eventos hasta el último día que estuve allá, por cierto, pensé que me dejaba el mendigo camión porque salía a las 10.45 y andaba como a las 10.25 en el centro, y todavía pasamos por mi ipod a la casa de Jimi (ah un amor ese tipo) y de ahí a la central camionera, no no todo un show.
No me puedo quejar...estuvo excelente.
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